El irrigador dental es un excelente complemento de la rutina de higiene oral diaria, no obstante, es frecuente que se disparen las dudas alrededor de su uso en los pacientes, ya que no goza de tanta popularidad como la seda dental, el colutorio u otros complementos del cepillado que refuerzan su eficacia.
Desde Clínica Dental Mancelle en Culleredo y Oleiros hemos elaborado esta guía con la que pretendemos aclarar toda la información de relevancia entorno al empleo del irrigador dental: en qué casos se emplea, cuando es recomendable, de qué forma debe aplicarse y si tiene o no posibles contraindicaciones. Vamos a descubrirlo juntos.
Qué es el irrigador dental y para que se utiliza
Este instrumento activa un chorro de agua sobre los dientes y encías con una fuerte intensidad que consigue eliminar los restos de comida acumulados en zonas de la cavidad oral a la que el cepillo convencional no consigue llegar. Por ello, resulta un complemento ideal en la rutina de higiene cotidiana para potenciar los resultados del cepillado y contribuir a mantener una sonrisa sana.
En qué casos está recomendado el irrigador dental
Lo cierto es que se trata de un elemento que está siempre recomendado, ya que contribuye a incrementar la eficacia del cepillado. No tiene contraindicaciones porque se trata de un método no invasivo, cuyo principal mecanismo de acción reside en el chorro a presión que emana para eliminar los residuos.
No obstante, para que el empleo del irrigador bucal no sea nocivo para la sonrisa, deben de tenerse en cuenta las mismas precauciones de uso que con el cepillo convencional. Un empleo excesivamente enérgico, con una presión excesiva en el chorro, o mal dirigido, puede provocar efectos indeseados como abrasión dental o retracción de encías.
Con las precauciones de empleo adecuadas, el uso de irrigador dental está siempre recomendado y muy especialmente en el caso de los pacientes portadores de ortodoncia: aparatos que suelen dificultar el cepillado y que necesitan de un complemento como este para eliminar por completo los restos de alimentos.
Por otra parte, los pacientes portadores de prótesis dentales o aquellos que sufren algún problema de movilidad que les complica el cepillado tienen también especialmente recomendado disfrutar de las facilidades y ventajas de limpieza oral que proporciona el cepillo dental.
Cómo funciona el irrigador dental
Una vez incorporado el depósito de agua al aparato, será la bomba de presión la encargada de realizar el trabajo de presión, con un chorro canalizado a través de una boquilla efectuará las labores de limpieza.
Si quieres conocer todas las claves para lucir una sonrisa sana y bonita y cuidar de tu higiene oral, te recomendamos que pidas cita en Clínica Dental Mancelle en Culleredo y Oleiros para recibir una valoración personalizada de tu estado de salud bucodental. ¡Te esperamos !