Cuidar la salud oral desde la primera infancia es una garantía de salud futura. Por ello, se vuelve fundamental inculcar en los pacientes infantiles una buena rutina de higiene oral y un calendario regular de visitas al dentista.
La preocupación de muchos padres es que, a menudo, los niños presentan un miedo irracional a ir al dentista que hace que el momento de la consulta se dé con mucho estrés para el menor. Por suerte, son muchos los métodos con los que los dentistas cuentan ya para hacer que la odontofobia no sea un problema que ponga en juego la salud oral del menor.
Desde Clínica Dental Macenlle, tu clínica dental de confianza en Culleredo y Oleiros, te contamos todo lo que necesitas saber para evitar que los más pequeños de la casa tengan miedo cada vez que tienen que acudir al dentista. ¡Muy atento a la guía de consejos que hemos preparado para ti! ¡Comenzamos!
Comenzar las revisiones desde pequeños
Los niños naturalizan lo que los padres les inculcan como rutina. Por ello, si el dentista no es para ellos una figura extraña, sino que si es alguien que los conoce desde que son bebés (lo cierto es que lo recomendable es hacer la primera visita entorno a los seis meses de vida, generalmente el momento en el que comienzan a erupcionar las primeras piezas) la experiencia no será traumática para ellos.
Háblale en positivo del dentista
Los niños se fían en gran medida de lo que escuchan en casa, lo sabemos bien. Por ello, si el clima que se respira en la familia entorno al dentista es relajado y distendido y las consultas son mencionadas como algo bueno y seguro, que no causa dolor y que no tiene que dar miedo, el menor se sentirá seguro siempre que necesite acudir al odontopediatra.
Explicar el procedimiento y premiar la actitud
Los odontólogos, por nuestra parte, también tenemos nuestros trucos para conseguir que los niños se sientan como en casa. Un método que seguimos habitualmente para frenar la posible incertidumbre que pueda sentir el menor es explicar, paso a paso, en qué consistirá el procedimiento y por qué motivo no le va a doler, algo que los tranquiliza enormemente.
Además, habitualmente entregamos algún pequeño obsequio como premio al buen comportamiento del menor, algo con lo que conseguimos activar su sistema de recompensa y hacer que cale en el niño o niña, poco a poco, la idea de que acudir al dentista puede ser una experiencia de lo más agradable.
Confía en una clínica capaz de atender las necesidades concretas de los más pequeños. Desde Clínica Dental Macenlle, tu clínica dental de confianza en Culleredo y Oleiros cuidamos de su sonrisa.